viernes, 13 de febrero de 2009

fotografia




Una de las tantas cosas que me gustan hacer es tomar fotografías, me encanta este medio de plasmar lo tridimensional en bidimensional, pero de una manera que ni la pintura con todos sus tromp de oil va a poder lograr... discutía con una amiga, hace no tanto tiempo, sobre la fotografía. El capturar un momento, un instante tan efímero, fugaz, pero que sin embargo, gracias a una maravilla llamada cámara pudo ser capturado, por lo menos su esencia. Aunque sé que las fotos que tomamos pueden ser engañosas, como en las fotos familiares en donde tras una sonrisa se esconden problemas y dolencias crónicas, pero que tan bien las disimulamos.


No quiero irme por las ramas, este blog va a ser un tanto positivo, se que la mayoría de los demás tuvieron un tono un tanto lúgubre. Ahora escribo para alabar a la fotografía. Hace unos días me fui a la playa con unos amigos, y hablamos del como tiendo a sacar a relucir todos los aspectos negativos de prácticamente cualquier cosa que se tope con mi sinuoso camino, tal vez porque así se de antemano que no me podrán decepcionar más tarde. Está mal, incluso, aunque cabe resaltar que no creo en los horóscopos, si creo que fue una gran coincidencia el leerlo más tarde ese día y decia (parafraseando) : procura ver el lado positivo de la vida, no critiques tanto. Aunque era un medio tan pero tan absurdo, me despertó y recalco, subrayo y resalto este hecho que yo pasaba a veces por alto.


Es importante buscar las cosas positivas de la vida, no meramente quedarnos en la queja. Si antes hable de que gracias a lo negativo, podemos ahora llegar a notar lo positivo, gracias a este juego de contrarios, bueno pues, a veces tendemos a dar lo positivo por sentado y lo negativo, por lo mismo que nos molesta, lo notamos más. Está mal. Basta ya de esta indiferencia, hay que abrir los ojos y agradecer lo que tenemos, y hoy agradeceré por la fotografía.


Un sueño frustrado que siempre he tenido es el de estudiar fotografía, este año podría haberlo hecho, pero era muy caro, o tal vez use eso como excusa... no lo sé. Lo que si sé es que tengo una cámara y a través de los viajes que he hecho, he logrado tomar algunas fotos de las cosas que más me atraían visualmente, principalmente flores, principalmente orquídeas, entre otras cosas. Bueno, los dejo con unas cuantas fotos que tomé que espero les gusten...





Cuando nos fuimos a Tambopata para hacer experimentos para las clases de Biología, nunca había estado en tal contacto con la naturaleza y desconectada de todo lo demás....



Cuando viaje a Cusco con mi mamá, ella es una fotógrafa autodidacta y me enseño a buscar nuevas perspectivas.


Simplemente me fascinan las flores, me parecen hermosas y están en todas partes, simplemente debemos parar para notarlas...




Vista de Machu picchu desde la puerta del Sol, fue una caminata intensa y a mi mamá se le rompió el zapato, fuera de eso fue genial.


Me encantan las fotos con cámara mecánica, honestamente me quedo con mi máquina mecánica sin dudarlo siquiera por un segundo, un milisegundo, un nano segundo? hasta cuánto se puede llegar, la verdad no lo sé. Es sumamente interesante como la cámara profesional te permite crear planos, lo que quieres resaltar, o lo que quieres que "jale" el ojo, lo vuelve nítido, y lo demás borroso, me fascina.

Como podrán ver soy una gran fanática de las orquídeas, no he encontrado muchas, pero a las que encontré les tomé decenas de fotos. No era exactamente su temporada.


No sienten que tienen una belleza extraña, indómita, son misteriosas, incomprendidas, que sé yo...




Recuerdo que para poder tomar muchas de estas fotos me tuve que meter al jardín prohibido, y un jardinero vino a sacarme... valio la pena.

1 comentario: